Tras los atentados del 11 de septiembre le preguntaron a James Cheek (ex embajador de Estados Unidos en Argentina), quien se proclamaba como hincha de San Lorenzo, al respecto de lo sucedido. Tras una larga y por demás incoherente perorata de acusaciones sobre las tantas maldades que poseía el líder talibán, como para rematarla, gritó:
- Inclusive... ¡Bin Laden es hincha de Huracán!
- ¿¡Cómo!?... -le dijo desconcertado Mauro Viale, el periodista, sin entender bien lo que decía.
- Sí, es quemero -ratificó el embajador.
- Ah... bueno... ¡pero tampoco se olvide bien que antes era socio de San Lorenzo! -le retrucó Viale (siguiendo la metáfora), con lo que acorraló a Cheek al respecto las vinculaciones de colaboración que habían tenido años atrás Estados Unidos y Afganistán.
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